Un poco como el acuario, el terrario cerrado retoma esta idea de recrear un pedacito de naturaleza en casa reemplazando el agua por un sustrato.
Los terrarios son pequeños invernaderos hechos en recipientes transparentes. Donde se pueden cultivar ciertas especies de plantas, principalmente aquellas que crecen en ambientes naturalmente húmedos y sombríos.
El terrario cerrado es un sistema que tiene su propio ciclo. Al igual que la naturaleza en la que vivimos, es una imitación en miniatura de la litosfera, la atmósfera, la hidrosfera y la biosfera. En él podemos cultivar plantas tropicales y subtropicales, gracias a su ambiente siempre húmedo, normalmente a alta temperatura y baja incidencia de luz. Condiciones que permiten simular el microclima del interior de un bosque tropical, como la selva amazónica, por ejemplo.
Pero, ¿cómo pueden las plantas sobrevivir tanto tiempo en un recipiente cerrado?
Al igual que los ciclos naturales de la tierra, el terrario es un sistema cerrado que recicla y reutiliza todos los recursos.
Debido al proceso natural de intercambio de elementos químicos entre los seres vivos y su entorno, los elementos cambian de estado entre sólidos, líquidos o gases a través de reacciones bioquímicas. Dichasreacciones son producidas por plantas, bacterias y descomponedores (como los hongos), que se encuentran presentes en el terrario. Así, cada elemento químico pasa de un medio a otro, a través de la tierra, el agua o el aire, y vuelve a su medio original, siguiendo un bucle infinito.
Para comprender mejor este equilibrio perfecto, es posible rastrear la circulación de cada elemento químico dentro de un sistema cerrado (es decir, nuestro terrario). No obstante, nos centraremos en los 4 ciclos fundamentales de la vida CHON, o los ciclos: hidrológico, del carbono y del nitrógeno, los cuales están relacionados con el ciclo del oxígeno.
El ciclo hidrológico
A medida que aumenta la temperatura dentro del vaso, el agua (H2O) depositada en el terrario, se evapora del suelo y se une al vapor de agua liberado durante la transpiración y la fotosíntesis. Un proceso llamado evapotranspiración.
Luego esta agua se acumula en la cubierta y las paredes del terrario, y fluye hacia la tierra, como la lluvia en la naturaleza, siendo nuevamente absorbida por las raíces de las plantas.
El ciclo del carbono
La fotosíntesis, es un proceso sorprendente, mediante el cual las plantas fabrican su alimento (glucosa). Este proceso tiene lugar en presencia de luz que atraviesa el cristal transparente del terrario. Las hojas funcionan como auténticos paneles solares que, además de luz, absorben dióxido de carbono (CO2) del aire. Las raíces toman agua con sales minerales del suelo para catalizar la reacción, produciendo glucosa (la principal fuente de energía de la planta) y liberando oxígeno (O2) y agua a la atmósfera.
Otro fenómeno completa el ciclo del carbono: la respiración. De hecho, los seres vivos del terrario, como plantas, bacterias y descomponedores, absorben oxígeno (O2) del aire y liberan dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera. En las plantas, la respiración se realiza a través de las hojas, y más precisamente a través de los estomas. Este proceso tiene lugar día y noche, pero aumenta su actividad por la noche, cuando la fotosíntesis está en pausa.
El ciclo del nitrógeno
Las plantas y los seres vivos en general utilizan el nitrógeno para la producción de proteínas, vitaminas y enzimas. Es absorbido directamente del suelo por las plantas, en forma de iones de amonio (NH4) o nitratos (NO3–).
Estas formas nitrogenadas se integrarán a la tierra por dos medios. El primero es transportado por bacterias que fijan nitrógeno diatómico (N2) del aire y lo transforman en iones amoniaco (NH4) o nitratos (NO3–).
El segundo proviene de la degradación de los desechos orgánicos generados por las plantas, luego degradados por organismos en descomposición presentes en el suelo, como bacterias y hongos. Las reacciones de descomposición producen nitritos (NO2), que son nuevamente transformados por otras bacterias en nitratos (NO3–), luego absorbidos por las plantas.
En conclusión, a través de los ciclos hidrológico, del carbono y del nitrógeno, nos damos cuenta de la vital importancia de los organismos que conviven en nuestro terrario, cada ser vivo juega un papel único e indispensable en la perpetuación de los sistemas naturales que reciclan constantemente los recursos. Así, integrados en perfecta simbiosis, plantas, descomponedores y bacterias pueden sobrevivir durante mucho tiempo en un terrario cerrado, creando un sistema cerrado en equilibrio autosuficiente.
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